28 julio 2024

Lo que la prensa nos contó (60): UN CORREO MARÍTIMO ARMADO HASTA LA MÉDULA

 

Lo que la prensa nos contó… (60)

UN CORREO MARÍTIMO BIEN ARMADO

Por José Ivars Ivars
Divulgador e Investigador Filatélico
©Ifac Filatélico

 

La curiosidad del filatelista, te hace llegar a conocer cosas que a primera vista te pueden sorprender, pero cuando las pones en contexto, son más fáciles de entender. Andaba uno revisando viejos archivos, en donde uno guarda alguna noticia aparecida en prensa, por el mero hecho de estar relacionada con Alicante, y la nueva lectura despierta, tal vez la curiosidad que de entrada no tuve en su momento.

Estoy ante un periódico gaditano, El Redactor General, que en su edición del 18 de julio de 1811, lleva en su interior una noticia referente al “Correo Marítimo” que unía la “Tacita de Plata” con las ciudades mediterráneas de Cartagena y Alicante. En aquella época, fueron muchos barcos los que se hacían cargo de transportar la correspondencia, pero si situamos en contexto histórico la noticia, tiene mucha más razón de ser, que el correo entre estas ciudades, fuese por mar y no por caminos convencionales: España estaba inmersa en la Guerra de la Independencia.

Detalle de lo publicado en la prensa, motivo de este artículo

Pero lo que sorprende de esta noticia, o al menos como la da el rotativo gaditano, es la descripción que hace del buque ó barco en el que se va a transporta correspondencia. Dice así la noticia: “…Correos. Para Cartagena y Alicante (…) la polacra correo, nombrada La Paz; su capitán D. Gabriel Sales, armada con 10 cañones, 3 fusiles, 24 pares de pistolas, 24 chuzos, 6 esmeriles, 2 pedreros y 180 frascos mixtos de fuego; saldrá el 24 del corriente con la correspondencia. Hai comodidad para pasajeros…”. Vamos que viajar en ese barco, debió de ser lo más seguro del momento, y lo más importante ¡La correspondencia a salvo en todo momento!

No es habitual que cuando se anunciaba la salida o llegada de un barco, llevase o no correo, se hiciera una descripción de las armas defensivas que se llevaban a bordo, y si del cabotaje o de lo que transportaba. Y no es que este tipo de barco, la polacra correo, fuese un barco de guerra. Todo lo contrario. La Enciclopedia General del Mar, en su volumen VII, la describe como “…Buque de aparejo redondo, de casco muy semejante al jabeque, con dos palos triples, sin cofas ni crucetas, y con el mismo velamen que los bergantines, aunque con la ventaja sobre estos de que arriando las velas superiores, quedaban al socaire de las inferiores y por ello se aferraban con facilidad. Algunas tenían el palo mayor de goleta y se denominaban polacras-goletas; otras lo gastaban con cofa y se denominaban bergantines-polacras, y también las hubo de tres palos denominadas polacras-corbetas y polacras-barcas.…”

Dibujo de una Polacra de la época

Durante la Guerra de la Independencia, con la invasión napoleónica, Alicante alcanzó un especial protagonismo al ser de las pocas regiones españolas libre de la ocupación francesa, llegando incluso a convertirse en “Capital del Reino de Valencia” con la capitulación de la ciudad de Valencia ante las tropas francesas en 1812. Anteriormente a esa fecha, Alicante ya había mostrado su obediencia a las Cortes de Cádiz, y su adhesión incondicional a la nueva Constitución.

En relación a la situación de Cádiz durante el asedio de las tropas napoleónicas en España, cabe decir que en febrero de 1810 la ciudad de Cádiz se vio asediada por los franceses, llegando las tropas hasta la Isla de León y la misma Cádiz, cerrando la ciudad al resto de la Península Ibérica, por lo que su única salida viable era el mar. Se crearían entonces 3 líneas marítimo-postales de cabotaje: La de Levante y la de Poniente que se establecen por Real Orden del 4 de febrero de 1810, y la de La Coruña que lo haría por la Real Orden del 29 de enero de 1811.

Visita del Puerto de Alicante en 1832

La línea de cabotaje marítimo-postal entre Cádiz y Cartagena, tenía una frecuencia semanal, y tenía paradas en puertos importantes del trayecto como Algeciras y Almería, donde el correo era descargado y trasladado a diferentes puntos de Andalucía, haciendo lo propio a su llegada a Cartagena, donde además volvía a cargar correspondencia para Alicante y desde allí a todo el Reino de Valencia.

Según la prensa escrita de la época, para la comunicación postal con el Levante, se usarían hasta 14 buques con destino Alicante durante los años en que España estuvo al mando del ejército francés.

Histórico documento sobre la defensa de Alicante frente a
los invasores franceses

Cádiz y Alicante fueron las 2 únicas ciudades españolas a las que “El Francés”, nunca tuvo acceso.

Como hemos podido comprobar en tantas ocasiones, y esta vez nuevamente, el correo nunca se detiene, por difíciles circunstancias que lo envuelvan. Simplemente armamos el vehículo y todos seguros a bordo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario